martes, 27 de junio de 2017

¿Puede la ganadería rendir más que la soja? 
Jorge Torelli, Vicepresidente del IPCVA, disertó en el 4to Congreso Ganadero de Rosario sobre los desafíos productivos para el sector ganadero y brindó una perspectiva del sector en 2017 a nivel internacional. 
“Argentina produce el 4% de la carne del mundo, Australia también, con la diferencia que lo hace con 32 millones de cabezas y nosotros con 53 millones, eso es eficiencia de producción”, con estos datos inició Jorge Torelli, médico veterinario y gerente general del frigorífico Mattievich, su disertación sobre Perspectivas en la cadena de ganados y carne en el 4to Congreso Ganadero de Rosario. 
El especialista destacó la ganadería de precisión como paso fundamental para ganar productividad en toda la cadena, apuntando a la medición de la productividad en kilogramos por hectárea: “Hay establecimientos que producen 200 kgs por ha por año mientras que otros campos de cría sobre pastura de alfalfa tienen un rendimiento de 500 kgs. y llegando en áreas de engorde 650 kgs, lo cual es comparable en rendimiento con una soja de 51 quintales por ha y sin riesgo climático”. Para esto, destacó la incorporación de planes sanitarios y reproductivos. 
El corte liviano y el foco en lo financiero 
Según el veterinario, “la ganadería se transformó en un negocio financiero, donde se entra en unos meses, se engorda y se sale rápido, sacando animales debajo el peso mínimo”. 
“Estamos faenando animales de 225 kg res carcasa, desaprovechando el desarrollo de sus hormonas naturales crecimiento que le permiten sacar su máximo potencial productivo en solo 30 a 60 días más”, explicó torelli agregó: “Si se pudiera aguantar ese tiempo se le cargaría a esa res 50 kg, que en una faena de trece millones de cabezas como en la actualidad se traducirían instantáneamente en 660.000 toneladas más de carne por año, pudiendo abastecer las necesidades de exportación y consumo interno. 
Otro eslabón que falla: el proceso industrial 
El faenado de animales livianos también está fomentado por el tipo de consumo tierno al que estamos acostumbrados. Pero de acuerdo con el especialista, “si a una res un poco más pesada se la ayuda con procesos industriales que están faltando como la permanencia de 48 hs en cámaras de maduración, y el enfriamiento para que se transforme músculo en carne, se produce una tiernizacion del mismo”. 
Para el veterinario Argentina lleva a cabo un proceso industrial deficiente porque se faena a la mañana y al día siguiente ya se lleva a carnicería, no estando ni 24 hs estacionada. 
Clave del 2017: la paciencia 
“Sabemos que los ciclos de la ganadería son biológicos y duran tres años, por todo lo que empezó hace un año y medio recien va a mostrar algunas cosas en 2018 y va a empezar a alcanzar potencial en el año 2020, es allí donde tenemos que estar atentos para alcanzar todo el potencial, pero por ahora hay que tener paciencia”.
En cuanto a las perspectivas para el crecimiento del sector a nivel internacional, la demanda de carne se dará debido al crecimiento poblacional: “El crecimiento demográfico supera la oferta de cualquier alimento, y justamente la carne es lo que más tiempo lleva producir, o sea que va a ser de lo más buscado”, agregó Torelli. 
Competitividad 
Para Torelli, la competitividad es otro de los problemas que afecta al mercado ganadero. “Respecto al cambio de nuestra moneda tenemos altos costos internos, fuerte carga impositiva, mientras no cambien eso, y si no se resuelve el problema de ser más competitivos y poder acercarse a los valores que tienen Uruguay y Brasil, vamos a tener un gran problema con los precios”, concluyó el asesor.